| Pese a la buena colocación y al trabajo incansable de los chicos del Leman’s, el partido de ayer en Cotorruelo III fue polarizado por completo por los jugadores de «la Ferro», pero tanto para lo bueno como para lo malo. Las actuaciones individuales más impecables correspondieron a los locales, por la polivalencia de Cholo, el temple de Ángel, la profundidad de Arroyo o el trabajo incansable de Álex, pero es que los azules también dejaron un sabor amargo en el paladar de los espectadores por la roja directa que vio Charly (minuto 89) y, sobre todo, por el golpe en la cabeza que a continuación se dio Adrián.

El portero de «la Ferro» saltó para atajar un balón aéreo y lo hizo, pero cayó mal y se golpeó la cabeza contra el césped. La conmoción llevó al susto, hasta parecer que se recuperaba cuando él árbitro, Sánchez Sánchez, le preguntaba “¿puedes seguir?, ¿cómo estás?”, y él asentía que adelante. Con el inmediato pitido final Adrián se desmoronó y se descubría que no estaba nada bien, que ni se acordaba que jugaba un partido, ni del resultado del mismo. Alarma general y llamada al 112. Trasladado en ambulancia al Hospital 12 de Octubre, el portero fue mejorando en su consciencia y, tras realizarle un TAC, fue dado de alta con mínimas secuelas por el golpe… como no acordarse del partido que había jugado.

Esta amnesia parcial no se puede considerar del todo negativa porque en el gol del Leman’s tuvo un destacado protagonismo Adrián. El tanto lo marcó Aganzo (minuto 75) a pase de… nuestro portero Adrián. Salió a despejar una cesión al lateral de su área con su pie izquierdo, y lo que hizo -involuntariamente- fue facilitar una genial asistencia al delantero naranja que, con notable precisión, envió el balón al fondo de la portería de la AD Ferroviaria. Por lo tanto, lo mejor es que Adrián no recuerde este lance. El gol del Leman’s significaba el 1-1 porque en la primera parte se habían adelantado los ferroviarios gracias a Charly (minuto 33), que remató de cabeza un córner botado con milimétrica precisión por Ángel.

La realidad es que, pese a concluir ese primer tiempo con 1-0 en el marcador, «la Ferro» pudo golear por las claras ocasiones de las que dispusieron Flavio, Arroyo y Ángel, pero ninguno acertó. Y en la segunda parte, más de lo mismo, con Rubio desesperado al desperdiciar un par de oportunidades para elevar su cifra goleadora. En definitiva, fue una magistral combinación la que dio la victoria a la Ferroviaria. Nacida la jugada en las botas de Cholo, su pase diagonal hacia la zona de Arroyo lo devolvió este al corazón del área del Leman’s en un pase raso que remató Álex (minuto 79) y significó un nuevo triunfo del equipo entrenado por Othman.